LAS BRUJAS EN ÁLAVA
Siglo XVII, la Inquisición procesa por brujería en Euskadi a unas 6.000 personas, la inmensa mayoría de ellas mujeres, muchas de las cuales son enviadas a la hoguera.
En muchos lugares del País Vasco se cuentan historias de brujas.
En Álava, encontrarás más de 60 lugares, que guardan en su toponimia alguna relación con ellas. Sorginzubi, Sorginarrate o Sorginerreka son algunos ejemplos.
¡Descúbre algunos de los rincones y las leyendas sobre Brujas en Álava!
¿QUIENES SON LAS BRUJAS O SORGINAK?
SORGINAK / BRUJA / HECHICERO
- La palabra sorginak proviene de sors egin, hacer suertes, de donde resulta también la palabra sortilegio y la francesa sorcière, que significan lo mismo.
- La palabra bruja, al igual que la palabra catalana bruixa y la galaico-portuguesa bruxa, provienen al parecer, de otro sustrato lingüistico.
Parece ser que la etimología inicial de la palabra es con “x”, de modo que en su forma más primitiva sería “bruixa”, en Catalán. El primer documento en el que aparece esta palabra data del siglo XIII. La mayoría de los eruditos tienden a pensar que puede tener un origen ibérico o celta.
- En castellano existe también la palabra hechicero, que ha llegado a tener el significado de brujo, pero que proviene del verbo hacer.
Ya desde el Neolítico el ser humano reconoció la superioridad de las fuerzas de la naturaleza.
La necesidad de un mediador con aquellos grandes poderes y las características que hacían de la mujer un sujeto mágico, determinaron la creación de estos conceptos.
Se considera que los poderes mágicos de las brujas provienen del diablo, en tanto que las hechiceras logran su magia gracias a sus conocimientos.
Con poderes sobrehumanos y tendencias malignas, las brujas están a las órdenes del diablo transformado en Akerbeltz o macho cabrío. Se les atribuye la destrucción inesperada de las cosechas, las averías de molinos y ferrerías, las enfermedades o muertes extrañas, el hundimiento de barcos, etc.
En muchos casos, para llevar a cabo sus malas artes, adoptan formas de animales tales como buitres, carneros, bueyes, cerdos, etc. siendo su forma preferida la de gato negro.
PARA PROTEGERTE DE ELLAS…
Un elemento protector usado en muchos hogares vascos es el eguzkilore o cardo silvestre, también conocido como sorgin-lore.
Colgado en la parte alta de la puerta principal de los caseríos, las brujas lo confunden con el sol. Al verlo por la noche, creen que el sol empieza a despuntar y huyen a sus refugios. Tampoco les gustan las campanas… Se cree que cuando éstas anuncian el amanecer, las brujas se retiraran a todo correr a sus escondrijos.
«Por encima de todas las zarzas… por debajo de todas las nubes…» Según la leyenda, éste es el conjuro empleado por las brujas para acudir al akelarre. Había de pronunciarse en su debido orden y sin cometer errores. De lo contrario, acabarían doloridas y arañadas.
LAS BRUJAS EN ÁLAVA
Brujas de Azaceta
Cuentan que en Azaceta vivía una bruja con la capacidad de adoptar la forma de un gato negro.
Según un relato popular en Azazeta, hubo una bruja que se transformaba en gato y salía a importunar a la gente por los caminos, hasta que, una noche, un hombre lo atrapó y lo encerró en una arcón.
A la mañana siguiente, la sorpresa de aquel hombre fue mayúscula al comprobar que, dentro del arcón, quien estaba encerrada era una mujer completamente desnuda. La dejó marchar pero la hizo prometer que no haría más brujerías.
Tiempo después, aquella bruja enfermó, pero no podía morir mientras no trasmitiese sus poderes a otra persona, cogiéndole de la mano. Finalmente a una del pueblo se le ocurrió que lo mejor era engañarla y en lugar de una mano, ofrederle el palo de una escoba para que lo agarrara. Lo hicieron así, y la enferma expiró.
Cuando hubo muerto la bruja, arrojaron la escoba en el horno de cocer el pan y pudo verse con asombro, cómo brincaba aquel objeto mientras se quemaba, al tiempo que se escuchaban extrañas explosiones.
Brujas en Álava
Mariturri (Fuente de las Brujas)
Entre los pueblos de Oreitia y Arbulo se localiza “Mariturri” – (Fuente de Mari) – también denominada “Fuente de las Brujas”. Según las leyendas locales, alrededor de ella se reunían antaño, en akelarre, las brujas de la zona.
Además según se decía, el viajero que pisase de noche la hierba de aquella fuente, perdía de inmediato el sentido de la orientación.
Brujas en Álava
Brujas de Alaitza
En Alaitza existía una bruja que, cuando alguno de la casa, sobre todo los niños, era malo, se le aparecía bajando de la chimenea en forma de gato.
Brujas en Álava
Las brujas de Narbaxa
Cerca del núcleo de Narbaxa se localiza la “Fuente de las Brujas”. Según se ha creído en la zona, allí solían reunirse todas las noches las brujas, para volar juntas hasta el akelarre de Amboto, en Bizkaia.
Brujas en Álava
Brujas de Orbiso
También se conoce en Orbiso la leyenda de la bruja que, convertida en gato negro, se entretiene en importunar a alguien.
Cuentan que un gato molestaba a un grupo de mujeres que se reunían por la tarde en la casa de una de ellas. Hasta que, hartas del gato, decidieron arrojarle un caldero de aceite hirviendo. Dicen que, al día siguiente, una de las vecinas del pueblo apareció con la cara quemada.
Brujas en Álava
Brujas de Korres
De la aldea de Korres la bruja era una tal Margarita Jauri, que se vio implicada en el proceso de 1610 contra las supuestas brujas de Zugarramurdi. Aunque tras el mismo fue reconciliada y puesta en libertad, debido a la presión y al trato brutal a que se vio sometida por el comisario inquisidor de Maeztu, se suicidó tirándose al río.
Brujas en Álava
Brujas de San Román de Campezo
Para conocer a las brujas, se colocaban todas las mujeres del pueblo en “corro” (formando un círculo) y se echaba a rodar un cedazo; donde se paraba éste, después de dar unas cuantas vueltas, era señal infalible de que aquella mujer era la bruja.
Brujas en Álava
Brujas de Apellaniz
Hubo hace tiempo un vecino a quien empezaron a molestar las brujas. En ocasiones, al ir por alguna senda, llegaba un momento en que le era completamente imposible continuar su camino y tenía que volverse al pueblo.
Otras veces, su ganado se soltaba en la cuadra y alborotaba, causando grandes destrozos.
Estuvo al acecho varios días, hasta que una noche vio entrar un gato negro, al que, con el palo que a prevención tenía dispuesto, pegó un buen “zarrazo”, dejándolo por muerto y encerrándolo en un arcón.
A la mañana siguiente, al levantar la tapa del arca, con gran sorpresa encontraron una mujer desnuda, y habiéndoles prometido que no volvería a hacerles daño alguno, la dejaron marchar.
Brujas en Álava
Brujas de Arraia-Maestu
Se decía que antaño las brujas lavaban la ropa, y lo hacían preferentemente de noche, en un pozo situado en el término de Larrea, perteneciente a Maeztu y situado entre Arluzea y Apellaniz.
Existe en Maeztu compartido por Apellaniz y Vírgala Menor, un labrantío denominado “Sorgimendi” – Monte de la Brujas.
También se cuenta en la zona, que dieron albergue en una borda de Apellaniz a una gitana que tenía fama de bruja, y que, por la noche, al ir a por paja para el ganado, la encontraron subida en una viga, con el cuerpo disforme y unas patas largas como las uñas de una araña.
Brujas en Álava
Brujas en San Vicente de Arana
En San Vicente de Arana una vieja mujer pidió limosna a un labrador. Este se negó y se marchó. Ella le dijo que se había de acordar.
Llegó la noche y las brujas entraron por la ventana del dormitorio del labrador convertidas en gatos y le arañaron a gusto. A la mañana siguiente, la mujer del labrador fue a Barria donde compró un escapulario, se lo puso a su marido y ya nunca más fue molestado ni por gatos ni por brujas.
Brujas en Álava
Brujas de Agurain
En Agurain, se habla de varias brujas o «sorginak», las más famosas eran la Zokorra, la Pipera y la Morena.
Brujas en Álava
Brujas de Egino
A principios del siglo XVII, el País Vasco se vio sacudido por diversos procesos de brujería cuyos máximos exponentes son las matanzas ordenadas por Pierre de Lancre en el Norte del País y el Auto de Fe Logroño, en 1609 y 1610, respectivamente. En Eguino fueron testificadas 6 personas; 2 reos reconocieron la existencia de un akelarre en el lugar.
Brujas en Álava
Brujas de Zuia. La Bruja del Unguento
Algunas de las historias de brujas más conocidas son de la época de la Reconquista. En Zuya, Araba, los soldados alaveses no entendían por qué no causaban bajas en el ejército enemigo. Ganaban una batalla y al día siguiente se encontraban con el mismo número de rivales. Al tiempo, un soldado descubrió la razón de sus problemas; una bruja resucitaba a los enemigos con un ungüento mágico. El alavés mató a la bruja y se hizo con la misteriosa pócima, a partir de ahí nunca fueron derrotados.
Brujas en Álava
Chabola de La Hechicera
En Elvillar, el más conocido y famoso de los dólmenes de Rioja Alavesa.
Su nombre, rememora una leyenda que lo relaciona con la casa de una bruja a la que en las mañanas de San Juan se oía cantar y pregonar quincalla.
Brujas en Álava
Sorginetxea (Casa de la Brujas)
(Casa de brujas) es el nombre antiguo del dolmen existente en el pueblo de Arrizala, aldea de Agurain. En el pueblecillo de Arrizala, cerca de Agurain, existe un dolmen que ha sido considerado por el pueblo como habitación de brujas, llamándolo Sorginetxe (Casa de brujas).
En Arrizala, aldea próxima a Agurain cuentan que Sorginetxe fue construido por sorginak que bajaron las piedras desde Atokolarri -Peñas de Entzia-.
Brujas en Álava
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